Cada obra representada por -art toys- y pinturas es una muestra del ser interno, que apunta a conectar con el corazón
Mercedes Molina es costurera y artista. Hace 15 años y con el fin de reutilizar la tela que sobraba en sus confecciones, empezó a hacer muñecos. Pero estos no eran recreaciones de afamados personajes infantiles, sino monstruos imaginarios, esqueletos, rostros enormes, creaciones totalmente originales.
Pronto se unió a su labor su hija, la artista Gabriela Chicaiza quien diseñó para la confección una serie de felpudos seres, peluches guarda secretos, los monstruos aromáticos y las ‘Fridas dobles’ para eventualmente fundar el colectivo ‘Xamakuco Art Toys’.
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Ahora, las artistas llevan sus creaciones a la exposición ‘Reflejos del Corazón / Descifrando laberintos emocionales’, que se inauguró en ¡Viva Arte!, al norte de Quito.
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“Cada obra representada por -art toys- y pinturas es una muestra de nuestro ser interno, que nos lleva a tomar consciencia de conectar con nuestro corazón y escucharlo”, indican las creadoras.
La exposición se puede visitar de miércoles a domingo, de 16:00 a 23:00.
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